El foro liderado por la Cámara Colombiana de la Infraestructura dejó puntos clave sobre el panorama de inversión y obras pendientes en 2024 que deben reanudarse este año. Uno de los principales desafíos para 2025 es la baja tasa de inversión en infraestructura, lo que genera incertidumbre en el sector.
Impacto de factores externos en la inversión
Natalia Ocampo, representante del Consorcio PST, destacó cómo decisiones de gobiernos extranjeros afectan la estructuración de presupuestos en infraestructura. Según ella, es vital contar con información actualizada para gestionar riesgos de manera preventiva.
“Este tipo de foros nos permite tener cifras actualizadas y análisis del contexto para tomar mejores acciones, ojalá preventivas y no reactivas frente a circunstancias que afectan el sector de manera importante.”
Afirmó Ocampo.
Además, mencionó que el acceso a materiales de construcción se ha encarecido y que esto afecta directamente la ejecución de los proyectos:
“Hay elementos transversales como los insumos que están siendo afectados por factores externos, lo que encarece la infraestructura y puede retrasar su desarrollo.”
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Por su parte, César Pabón, director ejecutivo senior de Investigaciones Económicas de Conficolombiana, enfatizó que las regiones deben liderar la reactivación debido a las limitaciones en las finanzas públicas nacionales. Explicó que el Valle del Cauca ha destinado en promedio 200.000 millones de pesos en regalías para infraestructura y que aún hay herramientas como las iniciativas privadas y las obras por impuestos que pueden impulsar el desarrollo.
“Las finanzas nacionales están en una coyuntura difícil, por lo que las regiones deben aprovechar sus recursos locales, como las regalías y las iniciativas privadas, para impulsar la infraestructura.”
Aseguró Pabón.
También resaltó la importancia de la inversión privada en estos procesos:
“Las iniciativas privadas pueden ser un gran aliado en este momento, permitiendo el desarrollo de proyectos sin depender exclusivamente del gobierno.”
Proyectos clave para el Valle del Cauca
La culminación de obras como la Vía Mulaló-Guerrero y los proyectos 4G y 5G son prioritarios en el departamento. Además, se resalta la importancia del tren de cercanías y del dragado del puerto de Buenaventura para mejorar la competitividad regional.
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Por tanto, María Fernanda Santa Palacios, directora ejecutiva de la CCI Occidente, resaltó la generación de empleo que estos proyectos traerán.
“La Buga-Buenaventura generará más de 6.000 empleos. También están en marcha el proyecto Rutas del Valle y el tren de cercanías. Además, hay expectativas con la renovación del concesionario del aeropuerto Alfonso Bonilla Aragón.”
Aseguró Santa Palacios.
Sobre el aeropuerto, destacó que la modernización es clave para mejorar la conectividad de la región:
“Esperamos que el nuevo concesionario traiga inversiones significativas para el aeropuerto Alfonso Bonilla Aragón, lo que beneficiará el turismo y el comercio.”
También, Juan Manuel Sanclemente, director del Comité Intergremial y Empresarial del Valle del Cauca, explicó que la infraestructura no solo impacta la conectividad, sino también la economía y la competitividad del departamento.
“Una infraestructura eficiente permite que las empresas sean más competitivas, exporten más y lleguen a nuevos mercados. Es un pilar fundamental para el desarrollo económico.”
Resaltó Sanclemente.
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De igual manera, recalcó que mejorar la movilidad en Cali y en el Valle del Cauca impactará de manera positiva en la calidad de vida:
“No se trata solo de construir vías y aeropuertos. Una mejor infraestructura significa que las personas pueden movilizarse con mayor facilidad, acceder a oportunidades de empleo y mejorar su calidad de vida.”
Cali y su avance en competitividad
Además, Cali se ubicó en 2024 en el cuarto puesto del Índice de Competitividad de las Ciudades, destacándose en sofisticación y tamaño del mercado. Además, el tejido empresarial creció un 1.8%, lo que refuerza su papel como motor económico de la región.